Las estadísticas empiezan a arrojar los primeros resultados relacionados con el impacto de las ayudas del Gobierno para la adquisición de vehículos nuevos a través del Plan 2000E, aprobado por el Consejo de Ministros a finales del mes de mayo.
Dentro del porcentaje de ventas, las empresas de alquiler de vehículos, especialmente en las zonas más turísticas del litoral peninsular e islas, parecen no haber notado especialmente la llegada de las ayudas, y la compra de nuevos vehículos sigue sufriendo una acusada caída que se cifra ya en una reducción de adquisiciones de más del 40% respecto al mismo período de 2008.
Hay comunidades donde los datos del primer semestre fueron tan negativos que el efecto Plan E se hace más cuesta arriba. En Andalucía por ejemplo, las compras de vehículos nuevos por empresas de alquiler cayeron casi un 90% tan solo en el primer semestre del año. Este hecho se debe a que las grandes compañías de alquiler de coches han reducido notablemente sus flotas debido a las malas previsiones.
Más del 70% de estas empresas han disminuido su facturación respecto al mismo mes del año pasado, por lo que la lógica es que, de momento, se mantenga la tendencia a la baja de los primeros 7 meses del año. Por si esto fuera poco, el freno en la concesión de créditos por parte de las entidades financieras y la previsión de una menor entrada de turistas en los principales núcleos turísticos, ha acentuado la reducción de flotas y la constricción del gasto.
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