Te proponemos algunas claves para optimizar consumos, seguridad del vehículo y máximo comfort durante la conducción
- Evita la sobrecarga del vehículo ocasionada por el exceso de peso y de objetos. El consumo de carburante puede aumentar un 5% por cada 100 kilos extra que carga el vehículo, por lo que recomendamos retirar objetos innecesarios como latas de aceite u otros objetos que solo se requieren en el vehículo en casos muy determinados.
- Revisa el estado del vehículo periódicamente y observa las instrucciones de mantenimiento. El estado del vehículo influye en su consumo, por lo que se deben revisar todos los controles electrónicos, el aceite y otros puntos clave para la conducción, como el nivel de agua y el nivel de carburante (si se detectan cambios bruscos en los niveles, puede ser que el vehículo sufra algún problema)
- Revisa la presión de los neumáticos. Los neumáticos no deben llevar una presión inferior a la recomendada por el fabricante., esto es, menos de 0,3 bares por debajo de la fijada. Además, el correcto estado de los neumáticos influye en la conducción, ya que es elemento de contacto del vehículo con el pavimento.
- Evita llevar las ventanillas bajadas mientras conduces, ya que aumenta el consumo entre un 3 y un 5%. Lo mismo ocurre con el portaequipajes, que aumenta la resistencia del aire y rebaja la eficiencia aerodinámica del vehículo.
- Enciende el aire acondicionado solo cuando sea estrictamente necesario pues puede llegar a aumentar el consumo en más de un 10%, así como las emisiones de CO2 a la atmósfera. Cuando se circula a más de 100km/h, es preferible sin embargo llevar el aire acondicionado encendido a las ventanillas bajadas.
- Conduce a una velocidad constante en carretera y trata de apagar el motor en los atascos, sobre todo si la parada es superior a 2 minutos. En cuanto a las marchas, se recomienda siempre utilizar marchas lo más largas posibles.
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